Con EL SENTIDO DEL OÍDO pudimos distinguir la diferencia que había entre RUIDO y SILENCIO.También con la música de de LA MARCHA RADESZKY, pudimos diferenciar los SONIDOS FUERTES y los SONIDOS SUAVES.
Nos llevamos una gran sorpresa cuando descubrimos que si nos tapábamos los ojos y los oídos, y metíamos algo en nuestra boca, ¡¡¡¡¡podíamos descubrir... qué era!!!!. Claro, porque nos lo dice LA LENGUA que es donde está EL SENTIDO DEL GUSTO.
Por eso sin verlo, nos metimos un caramelo en la boca y descubrimos que era... ¡¡¡DE FRESA!!.
LOS DECORAMOS CON NUESTRA CARA Y NOS LOS LLEVAMOS A CASA.
¡Ah!... Os tenemos que decir que todos nuestros sentidos ¡¡funcionaban perfectamente!!!.